La portavoz del grupo municipal Ciudadanos Carranque, Mari Ángeles Díaz, que hasta ahora había abanderado su lucha política contra la ocupación ilegal en Carranque, consiguiendo en la pasada legislatura “descender el número de ocupas de 80 a 10”; para la próxima legislatura propone luchar por conseguir que en Carranque “cada vecino que abra el grifo cuente con una calidad de agua óptima con una garantía sanitaria completa y una presión aceptable”
Carranque, 27 de enero de 2020.- Cosas simples para los habitantes de una ciudad como abrir el grifo y tener agua potable con un caudal suficiente, son hoy en muchísimos lugares de Castilla-La Mancha preocupaciones diarias que siguen siendo problemas que padecen muchos vecinos que parecen estar condenados a seguir así sin que nadie les solvente el problema.
“En Carranque los vecinos vivimos sin un caudal de agua suficiente y sin una seguridad y unas garantías sanitarias pertinentes, esto sólo indica la absoluta dejadez que se ha tenido por los distintos Gobiernos regionales de Castilla-La Mancha hacia los pueblos de esta región”, ha denunciado la portavoz del Grupo Ciudadanos en Carranque.
La concejal de Ciudadanos se ha preguntado cómo es posible que ahora se les llene a todos la boca cuando hablan de despoblación “y durante años han consentido que muchos ciudadanos de Castilla-La Mancha, como pasa aquí en Carranque vivamos con una calidad y presión de agua inaceptables, nosotros no somos ciudadanos de segunda”, denuncia Díaz.
La portavoz de Cs en Carranque ha argumentado que el pueblo se encuentra en una situación “lamentable” a consecuencia de un “deficitario caudal de agua potable”, y ha concretado que años atrás este problema ocurría en los meses de verano por el incremento de la población, “pero ahora ya nos pasa incluso en invierno”.
La concejal de Cs quiere hacer un llamamiento a todos los responsables institucionales ya que este problema tiene solución poniendo en marcha un depósito que se encuentra en Carranque.
La propia Díaz indica que ya ha mantenido reuniones tanto con aguas de Castilla-La Mancha como con la empresa concesionaria del servicio Hidrogestión, “la obra necesaria para subsanar este problema tiene un coste de 300.000 euros, para este ayuntamiento, pero resulta imposible acometer esta obra ya que tiene una deuda de 16 millones de euros y vivimos al límite”, ha lamentado la edil de la formación naranja. Una deuda, que subraya, “es para contar en un capítulo aparte”.